A continuación les presento un pequeño proyecto realizado a partir de una simple caja de madera. La idea principal requería decorar dicha caja con motivo surrealista y el resultado ha sido el siguiente.
Decidí no decorar el exterior de la caja con el propósito de representar la sencillez física de las personas. Desde fuera, todo son apariencias, una falacia incapaz de enamorar o de atemorizarnos. Sin embargo, el caótico interior, tan complejo y sublime, revela el auténtico rostro del hombre y aflora su espíritu animal, distinguiéndole simultáneamente del resto de las bestias salvajes. Asimismo, la verdadera pregunta que nos debemos plantear es:¿estamos dispuestos a abrir la caja?
El interior de la caja está pintado de color violeta oscuro para representar la profundidad del subconsciente, y relleno de recortes de papel de diferentes tonalidades y texturas que constituyen una nube, simbolizando esta última los recuerdos que se enredan en nuestra memoria. Dentro coloqué dos fotografías de mis padres, ya que considero que son estos quienes poseen una mayor influencia sobre la mentalidad de sus descendientes; una entrada de cine para la película animada Del revés, que se inspira en la inteligencia emocional del ser humano; una estrella fosforescente, como las que había en el techo de mi dormitorio desde que era pequeña, y un frasco que enjaula una ramita marchita, como alusión a todos aquellos recuerdos que se han consumido con el paso del tiempo pero de los cuales no queremos o no podemos desprendernos.
Y esto es todo por ahora.
¡Hasta la próxima!
Ingy
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